Escrito por Dra. Mayra Nogales, psiquiatra

Cuando un niño o niña tiene autismo los padres pueden comenzar a notar los signos entre las edades de 18 meses y 2 años, o incluso antes.

Si sospecha que su hijo tiene autismo puede notar que su bebé:

• No lo ve cuando usted lo llama, incluso si parece escuchar normalmente otros sonidos.
• No puede mirarlo a los ojos, sonreírle o notar cuando usted entra o sale de una habitación.
• A menudo parece estar en su propio mundo.

A medida que su hijo crece puede mostrar otros signos de tener autismo. El médico debe valorar varias áreas antes de diagnosticarle autismo. Estas áreas son las siguientes:

Lenguaje

Los problemas de lenguaje en niños con autismo varían desde niños que no hablan en absoluto hasta niños que hablan antes de lo habitual y usan un lenguaje complejo y avanzado en comparación con sus pares.

• Algunos niños con autismo comienzan a hablar más tarde que otros. Los niños que no dicen ninguna palabra hasta los 2 años de edad tienen retraso en sus habilidades lingüísticas. Pero no todos ellos tienen autismo.
• Algunos niños con autismo aprenden ciertas habilidades lingüísticas, pero luego las pierden y pueden dejar de hablar completamente.
• Su hijo a menudo puede repetir como en eco las palabras o frases que escucha.
• Algunos niños con autismo desarrollan habilidades lingüísticas avanzadas a una edad muy temprana, con vocabularios complejos y patrones de habla como el de un adulto.

Comunicación general

• A partir de los 9 meses de edad la mayoría de los niños señalan cosas que les interesan o lo que ellos quieren. Lo hacen al mismo tiempo que miran a sus padres. Se trata de una forma temprana y compleja de comunicación. Pero los niños con autismo lo hacen muy poco o no lo hacen en absoluto.
• Es posible que su hijo no interactúe con usted a través del juego como lo hacen otros niños, por ejemplo, es posible que no quieran jugar a “en dónde estoy” (juego en que papá o mamá se cubre el rostro con las manos frente al bebé) o juegos similares.
• Su hijo no puede usar expresiones faciales y gestos de la misma manera que otros niños. Por lo tanto, puede ser difícil saber lo que piensan y sienten y también a ellos les puede resultar difícil leer las expresiones faciales de los padres.

Problemas sociales

Es posible que los niños pequeños con autismo no quieran tener contacto físico y abrazar a sus padres tanto como lo hacen otros niños. Esto puede ser molesto para los padres y cuidadores.

• Es posible que su hijo prefiera jugar solo en lugar de con otros niños. Si se deciden a jugar con otros pueden acercarse e interactuar de maneras que parecen intensas o inapropiadas. Por ejemplo, pueden enojarse cuando otros niños no encajan en sus juegos exactamente de la forma en que quieren que lo hagan.
• Su hijo puede formar amistades que no duran debido a malentendidos.

Comportamientos rígidos o repetitivos

A los niños con autismo les gustan las rutinas y pueden ponerse ansiosos o molestos cuando se cambian sus rutinas o cuando no se les advierte de antemano sobre los cambios en la misma.

• Su hijo puede enojarse por los cambios en el hogar ya que él o ella puede querer hacer las cosas de la misma manera todos los días.
• Cuando tenga la edad suficiente para hablar, su hijo puede sentirse fascinado por un tema y querer hablar de eso todo el tiempo.
• Su hijo podría sentirse fascinado por una parte mecánica de un juguete, en lugar de con el juguete entero. Él o ella podría jugar con un juguete de una manera inusual, y luego enojarse si se intenta cambiar el juego.

Otros signos de autismo incluyen tener problemas de aprendizaje, enojarse mucho por los ruidos o la luz brillante, y tener problemas con la escritura y otras tareas que requieren mucha coordinación física.

Solo un médico especialista puede diagnosticar el autismo. Si sospecha que su hijo tiene autismo debe consultar un psiquiatra. En algunos países se recomiendan las evaluaciones del autismo a intervalos regulares que comienzan en la infancia. En Neurosaludmunay contamos con los especialistas que pueden diagnosticar y tratar la enfermedad de su hijo.

¿Qué pasará en el futuro con mi hijo/a?

Es difícil decir qué sucederá, ya que el autismo afecta a cada niño de manera diferente.

El apoyo adecuado, la educación y la rehabilitación lo antes posible pueden ayudar a su hijo a disminuir los problemas que se presentan mientras crece.

Los estudios de personas con autismo sugieren que:

• Aproximadamente 15 de cada 100 niños con autismo crecen para vivir solos.
• Entre 15 de cada 100 y 20 de cada 100 personas con autismo pueden vivir solas pero con algo de ayuda.
• Muchos adultos con autismo necesitan atención a tiempo completo por el resto de su vida.

La independencia de su hijo está relacionada con sus capacidades lingüísticas y capacidad de aprender cosas nuevas.

El apoyo psicológico para los padres y grupos de ayuda mutua pueden ser de utilidad para orientar a las familias y ayudarlas con contención emocional.

Usted puede visitar www.autism.org.uk una página destinada a brindar información a padres y familiares de personas con autismo.